Cap 74º "No pensé que sería tan difícil"

"La gente cambia, los recuerdos no"

Ella se fue y dentro de unos minutos llegó Clarissa con una pijama y su hermosa sonrisa.

—¿Qué es esto?—pregunta graciosa—¿Sorpresa de martes por la noche?

Sonrío—No exactamente.

—¿Entonces?

—Clarissa, sabes que te quiero un montón—le dije y procedí a darle un abrazo, fuerte y largo, como si se tratara del último—Estos son para ti—le mostré el peluche y los flores

—Gracias, amor.—me dijo con una sonrisa—Eso ya lo sé, pero ¿por qué hoy?

—¿Po, podemos hablar un rato?—le digo, estaba muy nervioso

—Tartamudeas, es algo grave.—afirma—Pasa

—¿Tu papá no está adentro?—odiaría que él esté escuchando todo lo que le voy a decir

—No, esta en su cuarto—me dice, su cara comenzó a cambiar—Deja toda esta intriga, Justin. No des tantas vueltas.

—Bueno, entremos.

Nos fuimos directo a su sala, nos sentamos en el mismo sillón. La miré a los ojos, esos que me han mirado con una ternura desde hace muchísimo tiempo y que no quiero que nunca dejen de hacerlo. La besé, y lo mejor de todo es que ella correspondió mi beso.

—Estas asustado, Justin—interrumpió nuestro beso para decirme eso—Dime que te pasa, odio no saberlo.

—¿Tú me quieres?—pregunto

—Sí—sonríe—, no lo dudes. Si es por eso que estas así, ya no lo estés más.

Ok, no sé como empezar—¿Harías lo que fuera por mi?

—Pues sí—contestó—, pero porqué lo preguntas.

Mis ojos me arden, aún no estoy listo—No pensé que sería tan difícil.

—¿Difícil qué, Justin?—me dice ella, ya un poco cansada de mi lentitud

—Es que,—le agarré sus manos y miré para abajo, no quería ver su cara—Debemos terminar.

Ella me suelta las manos—¿Qué estas diciendo? Pero yo no quiero.

—Ni yo, pero tienes que entenderme—realmente, ni yo me entiendo

—¿Entender qué?

—Estar contigo me afecta. No lo tomes a mal, a mi me encanta estar contigo. Pero afecta a mi carrera como artista. Soy muy pequeño como para estar tomando decisiones así, sin embargo no tengo opción. Desde que tú saliste en el periódico me han cancelado varias entrevista, y Scooter...

—Dame la verdadera razón, Justin.—ella no parecía entenderme—Ya te aburrí, ¿no?

—No, tú no me aburres, Clarissa. Entiende que es por mi bien, y por el tuyo.

Ella se paró del sillón, yo también lo hice—¡¿Por mi bien?! Claro, tú crees que "por mi bien" es no estar con el chico que me gusta. Creo que dejé bien claro que odio que digas esas tres palabras. ¿Sabes? En verdad no entiendo, no entiendo lo estúpido que puedes ser. Cómo dos cosas diferentes se te pueden ir de las manos—me dice, ella está exaltada y noto que los ojos se le ponen llorosos

—No te pongas así, odio que llores—le digo

—¡Entonces por qué rayos me haces esto!—responde

—Lo siento, en verdad lo siento. Solo que esto ya no está en mi manos

—Pues, ¿en manos de quién está?—me pregunta, muy seria

Yo no sé que responder—De nadie

—Quieres decir que ya todo esta perdido—me dice—; sí, todo está perdido. Todo, todo es nuestra relación. Lárgate, Justin

—¡No quise decir eso, Clarissa!—estaba aterrado—Solo quería darnos un tiempo, mientras que las cosas se tranquilizaban.

—Claro, ¿y cuánto iba a durar ese tiempo? Una semana, dos meses, tres, cuatro, un año o dos. Eres demasiado cobarde como para afrontar tus propios problemas. Lárgate, Justin—repite, las lágrimas le empiezan a salir

Yo no quería que me vea llorar, así que me paro y me dirijo a la salida—Clarissa, eres y serás lo mejor que me ha pasado.

—Adiós, Justin—ella no sonríe ni nada y me cierra la puerta

¿Qué es lo que he hecho? Simple, arriesgué la chica perfecta por la vida perfecta. ¿Qué es lo que soy? Un completo imbécil, y me siento como tal. Me tiré en el pasto de la entrada de la casa de al lado y empezaron a salirme lágrimas. No llores idiota, esto te va a pasar más de una vez. Trato de convencerme, pero ni yo creo mis propias palabras. Sin duda, estar destruido por dentro duele más que por fuera.

Después de un rato, mi celular suena.

—¿Qué quieres?—contesto

—Justin, Nicole me contó todo. ¿Cómo estás?

—Tirado y con heridas por todos lados—respondo

—¿Dónde estás?

—No entiendo, no entiendo cómo tú puedes jugar con dos chicas a la vez sin que ellas se den cuenta y que no sufras por amor. No entiendo como lo haces, Ryan.

—Yo tampoco enano. Dime dónde estas, llamaré también a Cole

—¡No, no llames a ese imbécil! Es amigo de Clarissa y lo que menos quiero, es acordarme de ella

—Pues hay que repetir lo de tu fiesta de dieciséis,  pero peor. Ven a mi cada

No estaba muy convencido, pero quería dejar de sentirme así, destrozado—Está bien imbécil, estoy en diez minutos

Fin de su narración.

Narras tú:

Después que Justin se fue estuve llorando un largo rato en mi cuarto. Todos en mi casa se enteraron lo que había pasado porque le conté a Nicole todo. Ella se había ido de nuevo a su cuarto.

Lo odio, lo odio, lo odio. No entiendo cómo me hace algo así, si hoy estábamos de lo más normal y ahora me viene con estupideces. No entiendo cómo me puede gustar un chico así, cobarde. A decir verdad nunca me había fijado en él de la manera que lo hago ahora. Tal vez simplemente no lo noté antes. Tal vez Justin sacó su verdadero yo y todo este tiempo me había mentido. Tal vez encontró a otra mejor que yo y no me quería hacer daño. Tal vez fui yo la que estaba mal en la relación, tan mal que ya no lo soportaba.

—¿Puedo entrar?—dice Michele que estaba en la puerta de mi cuarto

—Sí, ya voy a salir.—respondo y me voy

Me voy a la cocina por un vaso de agua. Pero, desgraciadamente veo las rosas que me había regalado Justin en el caño. Seguramente porque Michele las había puedo ahí. Hecho a llorar de nuevo y me acerco a ellas. Estas tenían una nota, una dedicatoria. La abro y leo que dice: "Cada día te quiero más, Clarissa. Lo nuestro va a ser para siempre, no lo dudes. -Justin B.". Lo que más odio de la gente, es que mienta. Por ello parto en miles de pesados esa tarjeta y los pétalos de las rosas. Si de algo estoy segura, es que ya no quiero sentirme así nunca más.

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Trajedía trajedía :( Casi me pongo a llorar mientras escribía, okno. Pero si me sentí horrible jaja. No se preocupen, que esto no termina así.

Este capítulo va dedicado a mi tocayita, no por la trajedía, sino porque comentó ye! y eso es importante para mi, gracias gracias :)
Otra cosa, ¡llegamos a las 10 000 visitas! wuwu, bueno

las quiero :)

Cap 73º “Tómalo o déjalo”

“Cariño,—él dijo—te amo” 

Justin me acompañó a mi cuarto, Carla y Ryan se quedaron un rato más arriba, querían estar solos. 

—¿Puedo entrar?—me preguntó cuando estaba abriendo la puerta

Mi estómago se retorció de nervios—¿Para qué?

Él sonrió—Quiero asegurarme de que estés bien

Le cedí el pase a la habitación—Entra

Él entró, lo primero y único que hizo fue tirarse a la primera cama que vio con los ojos cerrados, por suerte era de Carla. eché a reír.

—Ustedes consiguieron una mejor habitación que yo, es más grande y tu cama es más grande—me dice—¿De qué te ríes?

—Esa no es mi cama, es la de Carla

Justin saltó de esa cama a la que estaba al costado, esa sí era la mía—Ya lo sabía

–Ajá—le digo, mientras me acerco al filo de ella

Él me quedo mirando—Eres muy linda—cierra los ojos y suspira—No se como tuve tanta suerte de encontrarte

—La misma suerte con la que Scooter encontró tu video mi amor—sonrío, y voy a su costado 

—Supongo que sí—me dice y me da un beso en mi cabeza, me encanta cuando hace eso

Pasó el rato y escuche su respiración calmada, se había quedado dormido.

—Mi amor—le susurro

Él hace un movimiento brusco—Estoy despierto

—Estabas dormido, no..

—Clarissa—me interrumpe—Clarissa perdón por lo de hoy, debería haber sido el mejor día de mi vida pero lo arruinamos y ya no lo es. Yo te quiero, demasiado, sí—sonrió pero  siguió con los ojos cerrados—Siento, siento que yo soy un imbécil, pero tú me sigues queriendo. ¿Sabes? Deberías dejarme, soy muy poco para ti, pero no lo hagas ¡por favor!...Y, siento, siento que...todo me da vueltas

Me reí por como hablaba, le di un beso en la mejilla—Ryan hizo un mal trabajo contigo, duerme Justin, que mañana regresamos a Atlanta y el viaje es pesado.

La mañana siguiente me levante primero que Justin. La cama de Carla todavía seguía tendida, ella no había llegado. Justin y yo seguíamos con la ropa de la noche anterior, por lo menos yo, no había tenido tiempo de cambiarme. Me hice una cola porque mi cabello estaba enredado y procedí a levantar a Justin. Un beso.

De pronto se abre la puerta, era Carla con una camisa de Ryan.

—Hey, hey. Tórtolos esta también es mi habitación—nos dice, bueno solo a mi porque Justin seguía durmiendo—En medía hora tenemos que estar en el aeropuerto y ¡Justin! Scooter te ha estado buscando toda la noche, es mejor que te levantes ahora mismo

—Sigue durmiendo, lo voy a levantar después—le digo

—Ya, pero rápido porque en verdad Scooter está muy molesto

—¿Y esa camisa?—pregunta Justin con voz roncha

—¡Clarissa! ¿Qué le has echo al pobre?

—No cambies de tema Carla—río  

—Nada, tenía frío—responde

Obvio que no le creí, pero no quiero entrar en detalles este momento. Después de que ella se fuera Justin también se fue rápido para hablar con Scooter. Cuando me quedé sola pude bañarme y cambiarme.

Ya estábamos en el aeropuerto, en la sala de espera. Scooter nos había llevado a la sala de espera vip. Unos cuantos autógrafos y Justin se desocupó, peor hubiera sido en la otra sala.

—¿No te aburres?—le pregunté—De firman tanto papeles

—No—sonríe y me da un beso en la frente—Es lo que me encanta

La llegada a Atlanta fue rápido. Scooter me llevo en su carro a mi casa y estaba callado, con Justin. Él no quería pasar porque decía que mi papá iba a querer estar conmigo después de que no lo vi, tiene razón. Entonces abro la puerta de mi casa, se escucha la televisión de la sala. Ahí estaba mi papá.

Voy corriendo hacía él y lo abrazo por detrás—¡Papaaaaaá! 

—Hija, qué sorpresa—sonríe—Te he extrañado, ¿cómo te fue?

—Todo bien, la fiesta de Justin estuvo increíble. No sé como me dejaste ir, pero gracias—le digo

—No fue tan fácil, no sabes las veces que lo detuve para que no te vaya a buscar—me dice Michele, que salió de la cocina

—¡Michele! Gracias—río—a ti también te extrañé

—Yo también. Te preparé una cena de bienvenida, tu comida favorita—responde ella

—¡Que rico! Vamos a comer—dice mi padre

Suelto una pequeña risa—¿Y Nicole?

—Arriba, en su cuarto—dice papá—¡Nicole, tu hermana ya llego!

Se escucha unas pisadas rápidas por la escalera.

—¡Hermaanaaaaa!—grita—Por fin llegaste, tienes que contarme muchas cosas. Aunque ya se de todo un poco

—¿Qué?—no sabía de lo que Nicole me hablaba—Cómo es que...

—Bueno lo cuentan en la cena, vamos a comer—me interrumpe Michele

En la cena no hablamos del tema, hubieron tantas cosas que contar que Nicole nunca me explicó porqué. Pero lo tomé de un lado y como mañana habían clases me fui a mi cuarto a arreglar mis cosas y finalmente dormir.

—¿Qué hacen tantos camarógrafos aquí?—pregunta mi padre al llegar al colegio

—Ni idea—respondo

—¿No tendrá que ver con Justin?—pregunta mi hermana

—No que yo sepa, ellos ya saben que Justin estudia acá y no hacen escándalo todos los días

—Sea lo que sea, bajen del carro que van a llegar tarde—dice mi papá

Al bajar del carro escucho unos gritos de “¡ahí está!”, “¡enfoca bien su cara!” “¡que no se vaya!”. Seguido de eso veo muchas luces segadoras, miro a mi costado, había perdido de vista a mi hermana. Estaba perdida entre los paparazis. 

Alguien me coge de la mano y me jala fuertemente hacia un carro y me mete ahí. Era Justin, él me abraza y suelta que todo esto es una locura.

—¿Qué es todo esto?—le pregunto un poco extrañada

—Es de lo que te estaba protegiendo—responde Justin

—Estas en los periódicos, Clarissa. Felicitaciones—dice Scooter desde el asiento del conductor, luego me dá un periódico, una foto mía y de Justin en su fiesta estaba de portada

—Déjame decirte, que sales linda—dice Kenny, en el asiento del copiloto 

—Gracias Kenny, pero ¿cómo pasó esto?

—No tengo idea, creo que hubo un infiltrado—responde Scooter

Miré a Justin que se había quedado callado—Hey, no te preocupes. Estaré bien, me tendré que acostumbrar a ellos. Juntos vamos a superarlo

Justin miró a Scooter por el espejo del retrovisor, como si no me diera cuenta—Supongo que sí—lanza una sonrisa—¿Kenny nos ayudas a entrar a clase?

—Obvio

El colegio puso seguridad al rededor de el para que ningún camarógrafo pueda entrar. En el recreo me encontré cin Justin, me hizo una señal de corazón y se dirigió hacia mi,

—Amor—le sonrio—¿Qué tal tus clases?

—Una locura, no puedo dejar de pensar de que por fin todos conocen lo nuesto—él tenía una sonrisa de oreja a oreja y me dió un beso en la mejilla

—Yo tampoco. No sé cómo soportas los flash, te dejan ciega—reí

—Al principio es así. Pero una vez que...

Miró su celular, alguien lo estaba llamando.

—Es Scooter, es importante para que me llame cuando estoy en el colegio.

—Entonces contesta—le digo

Él desbloquea su teléfono y aprieta en el botón verde—Scooter, ¿qué paso?. ¡Qué! ¿Por qué?. Pero si estaban emocionados por la entrevista. Son unos idiotas, como creen eso. No. Me reuso. No me gusta hablar esto por teléfono, hablamos más tarde.—colgó, ahora él estaba molesto

—¿Pasó algo?

—Pasa que las personas son estúpidas,—me responde—menos tú.

Fin de tu narración.

Narra Justin:

Hoy había sido un día agitado, empezando por los paparazzis de esta mañana. Quería evitar a toda costa mi conversación pendiente con Scooter, sé lo que me va a decir no me va a gustar. Él de por si está molesto, en lo que va del día, han cancelado dos entrevistas de televisión mías porque estoy con Clarissa, dice que le dijeron que si no estoy soltero, no tienen raiting. Ottra escusa es que dicen que en la nota de periódico cuentan quevestaba medio ebrio, y que solo quieren chicos sanos, ilusos.

Inevitablemente, abro la puerta de mi casa y lo veo sentado en el sillón de la sala, mirándome.

—Sabía que si llegaba después de ibas a ir.—me dice—Siéntate, es serio lo que tenemos que hablar.

Me acerqué y me senté en a su costado—Ya lo sé, y no quiero ni lo voy a hacer.

—Tienes que, Justin. Ya van cinco entrevistas.

—Salir y decir «Soy Justin Bieber, estoy más que soltero y yo no bebo» no va a mejorar las cosas, las va a empeorar. Clarissa se va a enojar conmigo, a parte, ella no tiene ningún problema con ser fotografiada. Pero si digo eso, se friega la relación.

Él se ríe—¿Es que no lo entiendes? No es solo Clarissa lo que me preocupa, es todo. Te estas jugando todo lo que hemos luchado, tu vida, tu sueño Justin, Madison Square Garden Justin.

—Ella lo vale.—respondo

—Lo sé, Clarissa es una chica muy linda y se ven adorables juntos. Pero, ¡es tu sueño Justin! Pones en peligro tu sueño.

—Ella lo vale—repito

Él nuevamente se rie, pero es una risa nerviosa—Te propongo algo, tú decides tomarlo o dejarlo.

—Suéltalo.

Dos horas después desde que Scooter se fue de mi casa. Mi mamá me acompañó a buscar las mejores rosas que habían en Atlanta, y un peluche que decía I love you. Parado en la puerta de la casa de Clarissa, nervioso. Finalmente, toco el timbre.

—¿Justin?—se escuha una voz, pero no es la de ______(tu nombre)—¿Qué haces aquí?—Ella abre la puerta por completo, era su madrastra Michele.

—¿Está Clarissa?—pregunto

—Respóndeme, ¿qué haces aquí? ¿Por qué las flores?—me pregunta extrañada

—Supongo que ella se lo va a explicar más tarde. ¿Puede llamarla?

—Sí, la llamaré—ella se acerca un poco hacia mi—. Ví el periódico. Sea lo que sea, no le hagas daño, ella si te quiere y es una chica buena.

—Créame, no le voy a hacer daño. Ni pretendo hacerlo ahora. 

Ella se fue y dentro de unos minutos llegó Clarissa con una pijama y su hermosa sonrisa.

—¿Qué es esto?—pregunta graciosa—¿Sorpresa de martes por la noche?

Sonrío—No exactamente.

—¿Entonces?

—Clarissa, sabes que te quiero un montón

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Hasta acá este capítulo, ¿qué pasara? Tururuun.

Como siempre me gusta dejarlo en intriga, estamos pasando por una etapa crucial de esta novela. Estaré publicando el siguiente capítulo uno de estos días. Comenten que tal les pareció el capítulo, ¿qué crees que dirá Justin?

Laaas quiero♥

Cap 72º "Por favor, no te canses"

"Quédate conmigo para siempre"

Lo veo, veo su rostro. Un rostro que dice "Lo siento, fue por tu bien". Sinceramente ya estoy cansada de que todo sea "por mi bien". Dejar de hacer cosas que me gustan "por mi bien". Yo solo quiero estar con él, pero lo que me hace entender es que "por mi bien" yo no debo seguir con esto. Me concentro bien y lo escucho decir una vez más "Clarissa", y ya no hay más que decir, finalmente me derrumbo. Lloró y decido correr hacia el lado contrario, a un lugar donde no esté él.

—¡Clarissa, yo te quiero!—lo oigo a lo lejos, pero sigo mi camino

Espere unas cuantas horas en una heladería, una heladería como la de Atlanta donde una vez comí helado de lúcuma con Justin, el que me niega. No una, sino muchas veces. Descarado. 

Pido un helado de lúcuma como para recordar esos lindos momentos. De pronto se me sale una lagrima, ese sentimiento que ya no puedes más con la relación, pero que a la misma vez quieres seguir porque sabes que algún día de los que oasen él te hará feliz; aunque te hará sufrir de nuevo miles de veces más.

—Sabía que ibas a esta acá, Clarissa—me dice Justin, que se había sentado frente a mi

—Felicitaciones entonces, me encontraste. Estoy lista para escuchar una excusa, de las miles—dije sin pensar, la ira corría por mis venas

Sus ojos miraron los míos, sabiendo que ellos eran mi debilidad—En verdad no quise hacerlo y pensaba que no te iba a molestar

—¿Eso es todo? Pensaba que iba a ser algo mejor Justin, se te ha ido la originalidad—respondo

—Pero es que no entiendo porque te molestas tanto, solo fue un chiste

—Un chiste que se pasó por televisión nacional, y a mí me dejaste con una sonrisa estúpida cuando me enfocaron. Detrás de detrás de cámaras estabas actuando de lo más normal. Ya estoy cansada de ocultarme de las cámaras Justin

—No te canses, por mí. Recuerda la canción, tú canción—me dice y se acerca más a mi

Yo en verdad ni quiero que esto pase otra vez más, aunque se que va a pasar de nuevo, caigo—Si me prometes que ta no me vas a negar, es un sí

Él sonríe—Entonces, ¿estamos bien?

—Supongo que sí—digo—¿Eso es de lo que tenías miedo? De que me hagas daño, ¿a esto te referías?

—Sí, pero no pasará de nuevo 

Le doy un beso, la camarera nos vio y se rió. Me dejó mi helado y se fue. Al terminarlo, nos fuimos directo al hotel.

Llegó la noche y llegó el momento de la fiesta. Justin se había ido con Ryan y Cole más temprano a la azotea del hotel para arreglar los últimos detalles. Carla y yo, a arreglar nuestros últimos detalles de nuestra ropa y maquillaje. Decidimos llegar algo tarde, ya que queríamos hacernos esperar.

Finalmente decidimos subir. El lugar estaba repleto. Vasos tirados y vacíos por todas partes, la música estaba a todo volumen y la gente bailando por todas partes. La gente. Empecé a reconocer las caras. ¡Famosos! Me quedé boca abierta, ver a las personas que siempre veía por televisión era espectacular. 

—¡llegaste!—dice Justin y me abraza, olía a licor

—No entiendo porque demoran tanto, se han perdido bastante—responde Ryan, con una vaso en la mano

—¿Han estado tomando?—pregunta Carla, algo obvio

—Querida, dieciséis años cumple el niño. Dieciséis igual primera borrachera—responde Ryan

—¿Cómo que querida? Soy Carla, darling

Ryan le sonríe—Vamos a discutir de eso al aire libre

Después de decir eso se lleva a Carla cerca de la piscina, yo me quedo con Justin.

—Estas hermosa—me dice, me abraza por la cintura y me da pequeños besos

—Gracias Justin, felices 3 meses—le digo un poco fastidiada, pero no quiero arruinar el momento así que lo beso

—¿3 meses? ¿De qué?—me dice extrañado y exagerando su expresión

—Estamos juntos hace tres meses Justin, te cuento—respondo

—Ah, ¡vamos a bailar! Esa canción esta buenísima—me dice, con ello me da una vuelta

La canción era You make me feel de Cobra Starships.

Pase toda la noche con Justin. Él no llegó a vomitar, estaba medio picado pero creo que si sabía manejar su estado etílico. Durante a fiesta bastantes chicas miraban a Justin, caras conocidas y especialmente una, pero él, extrañamente, no les hacía caso y me miraba a mí. Bien por mí. Los últimos en la azotea fuimos Ryan, Carla, Justin y yo. Cole se había idi a dormir unas horas antes porque se aburrió. Al parecer, Ryan y Carla se habían emparejado, toda la noche estuvieron besándose y muy juntos. Pobre mi hermana, pobre Carla.

Justin me acompañó a mi cuarto, Carla y Ryan se quedaron un rato más arriba, querían estar solos. 

—¿Puedo entrar?—me preguntó cuando estaba abriendo la puerta

Mi estómago se retorció de nervios—¿Para qué?

Él sonrió—Quiero asegurarme de que estés bien

Le cedí el pase a la habitación—Entra

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Hola holaaaa! Se que este capítulo es corto pero el próximo tiene un tema muy importante y quiero que este todo en uno, si me entienden :) La pregunta de siempre, ¿qué pasará? Tururuun.

Las quiero, Gabriela♥